jueves, 31 de mayo de 2012

Puertos de la Ribagorza 2.012

26-05-2.012

Este Sábado, se disputó la XII Marcha Cicloturista Puertos de la Ribagorza.
Varios miembros de nuestro Club, se desplazaron hasta Graus para participar en dicha prueba.

El día fue espectacular, el recorrido muy bonito y la organización de 10.
¿Qué más se puede pedir?

Como a lo largo de la carrera nos cortamos en 2 grupos, publicamos dos crónicas. Cada una de ellas cuenta la experiencia vivida en cada uno de los grupos. 


Crónica de El Pulsaciones

El viernes por la tarde, me viene a buscar el Super a casa sobre las 17,15 h para acudir después a la tienda del  Boss. Los que íbamos a Graus, habíamos quedado allí para salir todos juntos una vez organizada la logística de los coches y de las bicicletas que podría llevar cada uno.

Después de cargar todo y recibir las bendiciones del General, partimos dirección Benabarre. Allí dormiremos hoy. ¡Que put....da! Después de tener reservado alojamiento en el mismísimo centro de Graus, unos problemas con la gente anterior encargada de las reservas, hacen que fuera imposible dormir allí. Resulta que los mismos apartamentos se los habían reservado a 3 grupos diferentes. Por suerte, la persona que se hizo cargo ahora de estos temas, nos hace una buena gestión y nos encuentra 2 apartamentos no muy lejos de Graus. ¡Gracias! Además, tuvo el detalle de costear la diferencia de precio y nos invitó en la cena a unos ricos postres y a los cafés.

Recogemos los dorsales, damos una vueltecilla por el pabellón y nos vamos a cenar.

Salimos de la cena bastante tarde ya, y eso hizo que no pudiéramos irnos a echar un pelotazo para acabar el día correctamente. Algunos pronosticaron que esto no podía ser bueno. Seguro que al día siguiente no andaríamos bien debido a esto. Eso de echarse a dormir el día previo a una carrera sin un poco de gasolina en el cuerpo, no era muy normal. Al final era la 1 de la mañana cuando nos metíamos a la cama.

A las 6 suena el despertador, y eso que yo, ya llevo media hora levantado. Parezco a los críos, los nervios no me dejan dormir nunca.
Desayunamos y a las 7,30 h toda la tropa nos vamos para Graus. La organización que llevamos es bastante buena. No es una de nuestras cualidades, así es que estamos un poco alucinados y preocupados a la vez, ja,ja,ja.
Después de las dudas de siempre, (que si me pongo los manguitos o no, que si me llevo el chaleco puesto o no, que si tal, que si cual) nos vamos a colocar a la línea de Salida. Para la 8,10 h. ya estamos allí. Hacemos unas fotitos y nos preparamos para salir.


Esperando a que empiece el baile
Al principio la gente empieza a moverse muy despacio, pero cuando ya giramos en la rotonda el pelotón empieza a estirarse y la cosa se pone “divertida”.
Intentamos coger una buena rueda y el Comandante Napolitano hace de las suyas. Se pega como una lapa detrás de una chica que va con un ritmo muy bueno y allí que vamos todos detrás.
Por el camino, me encuentro con Gonzalo, un Blogger de Sabiñanigo que sigo desde hace un par de años y al cual saludo. Estamos charlando un ratito y luego sigue para adelante. Este año va como un tiro y así lo demuestra el tiempazo que hace. ¡ Felicidades Gonzalo ! El objetivo que te planteaste para la QH lo tienes asegurado. Espero volverte a ver por Jaca o Sabiñanigo el mes que viene.

A lo que giramos para empezar a subir el primer puerto, Castillo de Laguarres, empieza a apretar el calor. Como siga así, creo que vamos a sufrir hoy bastante.
El capitán cuello de Hierro y yo, empezamos a poner nuestro ritmo y nos vamos un poco para adelante. El puerto es de los que me gusta, carretera estrecha, revirado y con porcentajes del 6%. Lo disfruto bastante. Por el camino, se pone a mi altura un Aberroncho de Zaragoza que me saluda. Es el marido de una compañera de trabajo con el que coincidiremos también en el avituallamiento del kilómetro 60.  

Seguimos subiendo y casi cuando estamos coronando el puerto, veo a Iñaki. Estuvimos con ellos en Monegros y en la QH del año pasado subiendo el Marie Blanque. Son una pareja majísima que conozco de seguir sus aventuras en su Blog.

Con Iñaki y Koro en la Maratón de los Monegros

Con Koro en el Marie Blanque 2.011
Como siempre, anda sobrado de facultades y va haciendo fotos de aquí para allí. Le pregunto por Koro y me dice que anda un poco más adelante. Le alcanzo en la bajada y le saludo. Últimamente anda un poco fastidiadilla con los pies. Se le quedan dormidos después de un rato encima de la bici. A ver si lo soluciona pronto porque da gusto ver lo bien que anda. ¡Animo Koro!
Creo que también van a la Jacetania. Tengo pendiente tomarme una cerveza con ellos.

La bajada desde Benabarre es de locos, nos ponemos detrás de dos tíos para intentar meternos en un grupo que teníamos a unos 200 metros y tiramos a una velocidad que da miedo ver, 74 km/h. Voy dando pedales todo lo rápido que puedo para no quedarme cortado y voy pegando botes encima del sillín porque me falta más desarrollo. El capitán, va como un tiro y pasa a dar un par de relevos. ¡Madre mía! Que no ocurra nada porque nos matamos. Se pone detrás de uno que va demasiado abierto pisando la línea que separa los dos carriles de la carretera y de repente ¡ MOCCCCCCCCC ! Una pitada de escándalo. Era un motorista de la Guardia Civil que pasaba justo por su lado en ese momento. Pienso, este nos está esperando más adelante y nos retira el dorsal y nos mete en “chirona”.

Al final conseguimos entrar en el grupo y aunque se sigue rodando muy fuerte, el esfuerzo es la mitad. Recuperamos un poco y enfilamos para el puerto de la Canal.
Este puerto es parecido al primero pero mucho más corto. Después de subir a buen ritmo, nos reagrupamos en un buen pelotón y nos vamos dirección Graus.
Vamos a parar en el avituallamiento para esperar al resto de la tropa a ver qué sucede. Mientras estamos allí, llega uno con un equipaje de Almogávar. ¡Coño! Si había venido a Graus otro miembro del Club y no lo sabíamos. Era Borre.

Después de 15 minutos aparecen por allí los demás. Parece ser que lo que presagiamos por la noche, se está cumpliendo. Al Napolitano le falta un par de cubatas para andar como es debido. Habrá que corregir esto para sucesivas carreras, ja,ja,ja,ja.

Esperamos a que recuperen y seguimos todos juntos la segunda parte de la carrera donde está lo más duro. La cosa empieza a picar para arriba y no parará en 40 kilómetros. El ritmo no es lento que digamos y en cuanto las rampas son un poco más fuertes, hay cortes y no es cuestión de ir forzando tan pronto, así que cuando llegamos al siguiente avituallamiento, Napolitano, Serch, Sin Patas y Chesare, deciden quedarse a su ritmo. El Super, que anda con la adrenalina a tope, dice que se viene con nosotros para hacer un test en el próximo puerto. Se quiere probar de cara a la QH.

Mientras tanto, empieza el recital de risas con el capitán Cuello de Hierro. Enganchamos a unos catalanes y empieza a hablar con ellos. Estaremos un buen rato subiendo juntos.
Pasamos al lado de un miembro de Club Ciclista los Conejos (que está aligerando peso en la cuneta) y le dice    “ ¡ Coooo !, ¿como van las inscripciones de la 4 Cimas? ” y el otro sin volver la cara le suelta “ ¡ Jodido esta el tema ! ”. El Capitán responde con la debida delicadeza “¡ Cagüen D..s !. A ver si me vais a dejar solo allí”. Casi me muero de risa.

Por cierto, lo de los avituallamientos, un espectáculo. Menos caviar, se puede decir que hay de todo. Otro día que voy a llegar a casa con 2 kilos de más. Empezamos a subir el puerto de Bonansa. Este, más duro que el primero. Noto las piernas ya un poco cargadas y no sé cómo voy a responder de aquí en adelante.

Empezamos los cuatro, pero enseguida, El Super y Cuello de Hierro, empiezan a forzar la maquinaria y cogen unos metros de distancia. Decido no seguirlos, prefiero subir a mi ritmo vivo, que llegar arriba con ellos para que me den la extremaunción. Conmigo se queda Borre. Parece que vamos lentos, pero por el camino vamos adelantando a bastantes ciclistas, así que el ritmo parece que es bueno.  
En plena subida, me encuentro con Ane Gabiria, una chica que conozco gracias a Koro e Iñaki. Le encanta el ciclismo y se dedica a ir a las marchas a sacar fotos de todo el mundo. ¡Gracias Ane! por compartir tu trabajo con todo el mundo. Inmortaliza el momento y seguimos para adelante.

Borre y yo en Bonansa

Cuello de Hierro abriendo camido al Super
Subiremos juntos hasta arriba pero en la bajada me distancio unos metros. Llegamos hasta donde nos están esperando con unos 2 minutos de diferencia. Parece que no hemos andado tan mal.

Cuando empezamos a subir el Puerto Col de Espina, Borre parece que acusa el esfuerzo al intentar cogerme en el descenso y nos dice que tiremos para arriba que ya nos cogerá, pero ya no le vemos hasta el final. En este puerto, el Super dice que sube conmigo. Ya ha tenido bastante prueba subiendo Bonansa con Cuello de Hierro. Llegamos arriba también juntos y el Capitán no está. Pensamos que se habrá aburrido de esperarnos y se habrá marchado para Graus.
¡ NO ES CORRECTO ! Nos estaba esperando arriba en el Puerto de Col de Fadas. Así es que cuando llegamos, nos juntamos los tres y nos lanzamos para abajo. Nada más empezar el descenso, el Super nos dice “tirar, que yo bajando soy un poco torpe. Ya os cogeré”.

El Capitán y yo tensamos un poco en el descenso para enganchar un buen grupo para que nos lleve desde Castejón de Sos, pero no hay manera. Solo logramos pasar a unos cuantos que van desperdigados pero no hay grupo a la vista, así que cuando llegamos a Castejón, bajamos el ritmo para esperar al Super.

En el trascurso de esto, nos juntamos con una chica que va sola y posteriormente se nos van uniendo más gente. Al final, cuando entra el Super, somos unos 15 tíos. El Capitán se pone a tirar como en él es habitual y de los 40 kilómetros que nos quedan, estuvo dando   ¡ Fuego al chaparral ! unos 30 kilómetros. ¡ Vaya locomotora !

Vamos por el Congosto a toda leche, pero llevamos un miembro del Club Ciclista Graus y como se conoce el recorrido, nos va cantando cada kilómetro de lo que queda. Así es que cuando va a llegar algún repecho, nos lo dice y bajamos el ritmo para seguir todos juntos. Se va uniendo más gente y al final seremos en el pelotón unos 30.

Entra a dar algún relevo uno con maillot de Ciclos Tour y otro del Hospital de Benasque. El resto va a rueda guardando fuerzas. Destacar una chica de Valencia que anda sobrada. ¡Como arrea la tía! Por lo que comentó luego, debía de correr en algún equipo femenino. El Super se queda alucinado por cómo anda esta chica y al final se hace una foto con ella en la comida donde la volveremos a ver.

El Super con su idol@
Enfilamos los últimos kilómetros, que se hacen un poco largos, pero ya se divisa Graus. La gente empieza a ponerse nerviosa por llegar y Cuello de Hierro le cede el testigo al Super para que entre el primero. ¡ Como se le ocurra a alguien saltar ahora, le va a caer una buena !

Al final llegamos juntos a la meta, después de disfrutar de otro precioso día de Cicloturismo.
Sin duda, repetiré el año que viene.

Nos vamos a comer mientras esperamos la llegada del resto del ejército. Aparecen a los 30 minutos, así es que por lo que cuentan, se han recuperado y han vuelto como locomotoras.
¡Bien! Nos tomamos unas cervezas todos juntos y a esperar a la próxima.

Foto cortesía de Eduardo Lecina


Crónica de Serch.

Viernes 6 de la tarde, 7 guerreros se presentan en la tienda del Boss, con los coches cargados con todo el material necesario para otra batalla campal, bolsa y burra. César llega un poco tarde pero ese tiempo será recuperado.
Tras despedirnos del Boss, partimos hacia Benabarre, lugar donde tenemos el alojamiento esta vez. Recogemos a la señora en cuestión que con las llaves nos acompaña a los alojamientos.
Descargamos las bolsas, las burras, metemos cervezas en la nevera y partimos para Graus.
Cogemos los dorsales, vemos un poco el material de la feria, nos ponemos hasta el culo de longaniza y chorizo de Graus y nos vamos a cenar después de tener algún problemilla con el GPS para encontrar el hotel donde teníamos que pagar el alojamiento.
La cena pues bien, barata, cervezas pocas, goleada del Barça en la tele y con un chupito y nada más nos vamos a dormir para prevenir que no ocurra lo del año pasado. Este ejército se está amariconando de una manera brutal.
Madrugón, desayunos varios, duchas, nos vestimos de guerreros y nos vamos hacia Graus, aparcando a la entrada igual que el año pasado. Vamos a la salida y no estamos de los primeros ni de los últimos, pero más bien atrás.

Esperando la salida

Salimos en principio más bien despacio, callejeamos por Graus y nos juntamos todos los guerreros cuando se empieza a rodar más deprisa. Los principios como todas las carreras, buscando ruedas para seguir un buen ritmo, pero a todo el mundo no le va el mismo ritmo, CUELLO DE HIERRO, empieza a seguir ruedas y no parece convencerle ninguna, hasta que EL PULSACIONES le dice esa rueda es buena que a ese lo conozco, no todo el mundo piensa lo mismo pero vamos un rato mientras el pulsaciones va hablando con él.  Pero de repente Cuello de Hierro acelera y solo El Pulsaciones va detrás de él, los demás de momento no aceleramos y seguimos nuestro ritmo. Empieza el primer puerto en Laguarres y El SUPER, SIN PATAS y yo vamos subiendo con SIN GLOBULO Y EL NAPOLITANO un poco por detrás, a sin patas se le sale la cadena y nos cortamos, Super y yo llegamos arriba del puerto, sudando como condenados, porque a pesar de ser muy pronto el calor está pegando de lo lindo al igual que lo hará en toda la carrera. Paramos un poco la marcha esperando al resto del grupo que nos coge un poco antes de acabar de bajar. Llega un descanso y tenemos unos kilómetros que más bien pican para abajo, se rueda rápido, no llevo cuenta kilómetros pero a ratos tenemos que ir a más de 60 por hora, luego me entero que el Pulsaciones se puso a 74 por hora en ese tramo, llegando al primer avituallamiento del día en donde nos esperaban Cuello de Hierro y el Pulsaciones.
De allí al kilómetro 100 todos juntos pero no todos vamos igual, mientras Andrés irá sin pulso, con George y el Super ya nerviosos por delante, Nacho y yo les seguimos y El Napolitano empieza a dar señales de que no va fino ese día, como tantos otros le tocará sufrir lo que no está escrito, pero asín es él y va con Sin Glóbulo que de momento va reservando.
Llegamos al 2º avituallamiento, comemos un poco pero sobre todo bebemos Aquarius y Coca Cola por litros pues hace mucho calor y nos juntamos con Chema y un conocido de la tienda del Boss que va acompañado de Luis, un bravo guerrero que luego será crucial para acabar la carrera, hablamos un poco, ellos salen un poco antes y nosotros junto con BORRE, otro Almogávar que llegó en ese momento nos disponemos a hacer la 2ª parte de la carrera.
Ya un primer grupo se distancia un poco. Cuello de Hierro, El Pulsaciones y El Super están nerviosos y tienen buenas piernas y se adelantan junto con el Borre que decide ir con ellos, yo miro para atrás, hablo con El Napolitano que tras unos momentos de desconcierto nos dice una frase mítica de Lola Flores “SI ME QUERÉIS....IRSE POR DIOS IRSE”, Sin Glóbulo nos dice que lo va a acompañar él y Sin patas y yo mismo nos vamos marchando poco a poco. Al rato y una vez ya en el recorrido largo (los de la corta se habían ido) nos viene el puerto de Bonansa. Muy bonito y muy llevadero en los 5 primeros kilómetros de los 8 que tiene el puerto, los 3 últimos tampoco son muy empinados pero son más constantes sobre el 6-7%. Llegamos arriba, el calor le pega, pero la bajada es rápida de cojones, ni nos enteramos y ya estamos abajo empezando a subir otra vez.

El Comandante Serch y Sin Patas

Napolitano y Sin Glóbulo

Se nos cruza una chica con unas piernas como tablas, nos pasa subiendo y la cogemos bajando, nos cruzaremos con ella varias veces y también un hombre que aparenta ser algo mayor pero lo que más nos sorprende es que va con camiseta larga y culote largo, ¡¡joder me asfixio solo de verlo!!.
Después de rodar un poco, Sin Patas me dice que le duele la planta del pie y que tiene que parar, afortunadamente el avituallamiento del último puerto llega enseguida y paramos. Allí nos volvemos a juntar con Chema y Luis a los que ya no dejaremos en todo lo que queda de recorrido.

Comemos, bebemos  y justo cuando partimos los 4 aparece El Napolitano que me dice textualmente “el próximo puerto no sé si lo subiré” y Sin Glóbulo que también parece cansado, pero van juntos, por lo que nosotros seguimos para arriba. Puerto de La Espina, Chema parece que sufre subiendo, pero siempre tiene tiempo para un chiste, una gracia o palabras de ánimo, “subir vosotros que a mí me da la risa” o al rato “ yo es no kiero eh???. Es por no humillaros ”. 

Su amigo Luis parece que va cómodo con mucho desarrollo y le digo fuerza un poco y tira para arriba que nosotros nos quedamos acompañando a Chema, ¡¡La madre que lo parió!! Como el que no quiere la cosa, mete el plato grande, se pone de pie y en un minuto ya lo no veíamos, 7 kilómetros al 7% de media, cuando todavía nos quedaban a nosotros 1,5 kms. ya bajaba a buscarnos. Y así llegamos hasta arriba del puerto en donde hay otro avituallamiento.

Para no ser menos volvemos a parar porque Chema quiere mear y nosotros comemos sandía, sándwich de jamón y queso, coca cola, más de 10 minutos y a lo que salíamos llegan otra vez el Napolitano y Sin Glóbulo. Les decimos que si vienen y los esperamos, ya no queda nada más que una subida pequeña y todo bajada por lo que preferimos ir juntos. Después de una pequeña bajada subimos el Col de Fadas que es corto y ya nos hemos juntado 6 Almogávares, y empezamos a bajar como motos y empezamos a juntarnos con un montón de peña que quiere coger rueda. El Congosto se baja bien pero, aunque menos que el año pasado, el aire  pega de cara y hay que coger rueda.
Luis toma el mando de las operaciones y junto con él otro mozo que llevaba un amigo un poco más justo (como todos) y entre los 2 empiezan a bajar a más de 40 por hora. No tenemos tiempo para respirar. Si te quedas colgado mueres y si sigues sufres, pues toca sufrir. Más de 30 de los más de 50 kilómetros que quedaban los hicieron entre los 2 tirando y un montón de pelotón detrás de ellos, hasta que a uno de ellos le avisa su amigo que no aguanta el ritmo y va acalambrado, entonces le deja solo a Luis al mando del grupo. Luis es una máquina, sigue él solo durante más de 15 kilómetros y nadie le damos relevos, pero volvíamos a toda ostia. A falta de 9 kilómetros me doy cuenta que Luis empieza a necesitar ayuda y aunque voy justo digo—aquí hay que reventarse pero hay que ayudar, doy relevos como puedo y lo más largos que puedo. Luego me dirá que le vinieron muy bien por lo que ha merecido la pena.
¡¡¡Atención!!! El muerto del Napolitano en un momento dado me da un relevo, JAJAJAJA cuando se trata de chupar rueda no lo dejas ni con agua hirviendo, jajaja, estaba muerto antes pero rodando aguanta como un jabato y al final llegamos a la meta. Miro el reloj y más menos, rondamos las 8 horas como el año anterior.
Llegamos exhaustos, vacíos y con las piernas echas fosfatina, pero es lo que hay, Sin Patas y el Napo nos abrazamos y nos damos cuenta que Sin Glóbulo se ha quedado cortado. Al poco rato viene y nos dice que en un descuido se ha roto el grupo y no ha podido cogernos.
Nos juntamos con Cuello de Hierro, El Super, El Pulsaciones y con Chema y Luis al que invitamos a 3 cervezas y a lo que quiera ya que de no ser por él hubiéramos sufrido mucho más y hubiéramos tardado bastante más rato.
Hidrataciones varias, algo de pasta que no está muy pallá, fotos al sol y tras varias bromas nos contamos como nos ha ido y nos vamos para casa. Otro objetivo cumplido y otra carrera más PA LA SACA..........


Tomando la dosis de medicina recuperadora.

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